A día de el día de hoy prosiguen existiendo dudas con relación a la higiene de los pequeños pequeños, sobre todo lo relacionado con la frecuencia con la que debe lavarse el pelo. Los especialistas en el tema aconsejan lavar el pelo de los pequeños cuando esté sucio, al tiempo que en el caso de los bebés lo recomendable es hacerlo dos veces por semana. Esto es la regla general con lo que los progenitores deben aplicar el los pies en el suelo y lavarlo cuando lo consideren preciso.
En el próximo artículo te charlamos de algunos aspectos a tomar en consideración en lo referente al lavado del pelo en los pequeños.
La pubescencia y el lavado del pelo
A partir de los trece años de edad, los pequeños entran en la llamada fase de la pubescencia, produciéndose una serie de cambios hormonales que repercuten de forma directa en la piel y en el pelo. Es normal por ende que el pelo al llegar a la pubescencia se vuelva considerablemente más graso con lo que la frecuencia del lavado del mismo ha de ser considerablemente mayor. Los progenitores deben llevar cuidado con los productos utilizados y optar por aquellos que asistan a sostener el pelo de los hijos en perfectas condiciones.
Aspectos a tomar en consideración en el momento de lavar el pelo a los niños
- Antes de lavar el pelo al pequeño, es esencial adquirir un champú que sea concreto y suave para no maltratar el cabello. Si el pequeño padece alguna afección en el cuero capilar es preferible asistir al pediatra ya antes de aplicar ningún género de producto.
- A la hora de empapar y lavar el pelo es esencial eludir el hacerlo con agua demasiado caliente y hacerlo con una temperatura media. El agua caliente puede dañar con seriedad la salud del pelo del pequeño.
- Si el pelo del pequeño es demasiado retorcido y cuesta mucho desembrollarlo, lo recomendable es emplear un aerosol específico a fin de que puedas peinar exactamente el mismo sin inconveniente alguno.
- Una vez hayas aclarado de forma perfecta el pelo del pequeño es recomendable secar exactamente el mismo con una toalla de microfibra. Con esto lo que se procura lograr es quitar toda la humedad posible y evitar el empleo del secador. Los especialistas desaconsejan por completo los secadores y abogan por el empleo de las toallas en el momento de secar el pelo mojado.
- No es exactamente lo mismo un pelo llano que uno retorcido y rizado. Este último va a precisar considerablemente más cuidados tanto en en el momento de lavarlo como en el momento de aclararlo.
En terminante, es esencial emplear el los pies en el suelo en el momento de lavar el pelo a los más pequeños. Cada pequeño es diferente, con lo que no hay una regla común en lo que al lavado del pelo se refiere. Lo que debe quedar claro es que no hace falta el lavarlo todos y cada uno de los días en tanto que se puede llegar a dañar la salud del mismo. En el caso de observar el pelo demasiado graso y sucio, los progenitores deben lavarlo siempre y en toda circunstancia con productos acordes a la edad del pequeño.