Si te sientes bien, estás más guapa. Eso es un hecho irrebatible. Mas ¿de qué manera desenredar el complejo rollo sensible? ¿Hay una explicación racional para los sentimientos supuestamente no racionales: el temor, la ansiedad, la euforia…? Pues todo es más precioso (y simple de manejar) cuando lo comprendes, ‘La ciencia de los sentimientos’ (Editorial Autobiografía), el último libro (y el primero planteado a nivel divulgativo) del pensador y psicoanalista, Ignacio Rodríguez de Rivera.
Este reputado teorético en filosofía, física y neurociencia es integrante de asociaciones científicas internacionales; maestro de postgrado; uno de los mayores especialistas en Freud de España y creador del CEAP, centro psicoanalítico vanguardista en este país). Rodríguez de Rivera, gaditano de cuna y madrileño de vida, desatendió el orden de ser ingeniero, se enamoró del Psicoanálisis (emergente y considerado “de hippies”) y creó el CEAP, centro vanguardista en España. Su nueva obra, “La ciencia de los sentimientos” es el ensayo que hay que leer sí o bien sí para comprenderte mejor a ti.
Rupturista y también irreverente en muchos aspectos, semeja empeñado en enterrar aquel viejo refrán que decía: “el corazón tiene razones que la razón no entiende”. Pues resulta que ahora sí que las comprende.
En su primera parte, plantea un alucinante viaje por una nueva ciencia que se atreve a desmontar (con datos experimentales) la histórica guerra entre lo racional y las emociones. En la segunda (pueden leerse sin inconveniente de forma independiente) desgrana la aplicación práctica a nivel de auto-conocimiento y mejora del bienestar sensible diario y lo hace desde una perspectiva totalmente diferente a cualquiera de las planteadas hasta la data, ofertando herramientas para dar contestación a esas preguntas que todos nos hemos hecho alguna vez: ¿Por qué razón de repente estoy triste? ¿Esto que siento va a significar que me he enamorado?…
“Sentir es como respirar- expone el creador- solo que respirar tiene una explicación científica, con lo que no nos cuestionamos el proceso. Lo damos por sentado pues comprendemos la teoría: si duermes respiras detenidamente, si corres de forma entrecortada… Mas ¿y si para los sentimientos asimismo hubiera una explicación basada en la ciencia? ¿Podría asistirnos a darle menos vueltas a la cabeza y no cuestionarnos a cada paso lo que sentimos, a tenerlo más claro desde el comienzo?”.
La obra de Rodríguez de Rivera invita a darle la vuelta como un calcetín a nuestra forma de comprender las emociones, poniendo negro sobre blanco todo cuanto siempre y en toda circunstancia deseamos saber sobre por qué razón sentimos lo que sentimos y de qué manera lo sentimos, explicándolo, por vez primera, mediante la ciencia.
Y bien sabes, si te sientes bien por la parte interior, te ves mejor asimismo por fuera. Vale la pena ¿no te semeja?
Luisa G. de Iriarte
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