Todos los comestibles que se consumen provocan una contestación en el cuerpo, en ocasiones positiva y a veces puede ser negativa. Por muy naturales que sean esos comestibles, pueden darse circunstancias como nosologías o bien enfermedades en las que ciertos comestibles resultan más peligrosos que beneficiosos. Algo de esta forma es lo que sucede con ciertas enfermedades autoinmunes, en concreto con las que generan inflamación crónica.
La inflamación es una contestación natural del organismo, un mecanismo de defensa frente a una amenaza. En el momento en que una bacteria o bien un virus entra en el cuerpo, este responde inflamando la zona para eludir que se expanda y dañe otras zonas aledañas. El inconveniente es que a veces, la inflamación puede volverse crónica, lo que supone un peligro para otro género de enfermedades graves.
Dieta antiinflamatoria, exactamente en qué casos se recomienda
La dieta antiinflamatoria está concebida para las personas que precisan contrarrestar los efectos de la inflamación crónica, como el caso de pacientes con enfermedades autoinmunes. Asimismo está recomendada para personas que desean adoptar un modo de vida más saludable. Puesto que entre otros beneficios esta dieta ayuda a reducir el colesterol, acelera el perder peso, se reduce el peligro de padecer enfermedades cardiovasculares y reduce los niveles de glucosa en la sangre.
Esta dieta consiste en introducir comestibles que por sus propiedades nutritivas, efectúan un trabajo antinflamatorio en el cuerpo. Como suprimir todos los que pueden ocasionar o bien acrecentar la inflamación. Este género de dieta, del mismo modo que otras dietas restrictivas, debe estar supervisada por un médico o bien nutricionista. En especial si sufres de una enfermedad para eludir cualquier peligro en tu salud.
5 comestibles que debes incluir en tu dieta antiinflamatoria
Además de efectuar cambios en la nutrición, para reducir la inflamación crónica es fundamental efectuar cambios de hábitos. Dormir bien es parte esencial, como eliminar el tabaco y todas y cada una de las substancias que puedan resultar dañinas para la salud. En lo que se refiere a la nutrición, la dieta va a estar basada en comestibles naturales, verduras y frutas, pescado azul, huevos, aceite, condimentas y plantas.
La lista de comestibles que puedes tomar es larga, con lo que no se trata de una dieta restrictiva. Sin embargo, tan esencial es introducir comestibles antinflamatorios, como suprimir aquellos que resultan muy perjudiciales. Como el azúcar, los procesados, el aceite vegetal, los hidratos de carbono refinados, el tabaco, el alcohol y las carnes procesadas. En lo que se refiere a los comestibles que debes incluir en tu dieta antiinflamatoria, estos son los mejores.
- Las semillas de chía y las semillas de lino: Consideradas un super comestible y base de la nutrición de bastantes personas hoy día, las semillas de chía y lino poseen grandes propiedades nutricionales. Entre ellas, el ácido graso Omega3, que es un antinflamatorio natural.
- Las verduras crucíferas: Como la rúcula, el brócoli, el repollo, las coles de Bruselas o bien los rábanos.
- Cúrcuma: Entre las condimentas, esta es en especial ventajosa en una dieta antiinflamatoria. No en balde la cúrcuma se equipara a nivel natural con el ibuprofeno.
- Los frutos rojos: Los arándanos, las frambuesas o bien las moras son frutas ricas en antioxidantes y tienen grandes propiedades antiinflamatorias.
- Las verduras de hoja verde: La clorofila que poseen sus hojas asisten a reducir la inflamación, aparte de ser ricas en hierro y minerales que favorecen la expulsión de las toxinas del cuerpo.
Cómo eludir la inflamación crónica
Si padeces frecuentemente lesiones musculares, tienes capítulos de agobio, ansiedad o bien depresión, como usuales trastornos sensibles, incluir estos comestibles en tu dieta puede resultar muy favorecedor. La inflamación crónica es uno de los grandes males de nuestro siglo, un trastorno que afecta cada vez a más personas. Muchos son los factores de peligro, la polución, el consumo de tabaco, el agobio, la carencia de sueño y una nutrición cada vez menos natural y más artificial.
En ciertos casos no se puede eludir la inflamación crónica, como en el caso de determinadas enfermedades como la Arteritis de Takayasu. Mas en la mayor parte de los casos se puede eludir con una nutrición más saludable, más natural y recobrando hábitos de décadas pasadas. Comer para vivir y no para enfermar, ha de ser tu máxima si deseas cuidar tu salud. Incluye estos comestibles en dieta antiinflamatoria y pronto apreciarás la diferencia.