Siempre os animamos a hacer ejercicio. Hoy os mostramos otra forma de tonificar el cuerpo con las plataformas pasivas de musculación sin esmero.
Desarrollar músculo y abrasar grasas es la ilusión y la meta de muchas de nosotras. No obstante, nos gana la vagancia de ir al gimnasio. Ya os charlamos de una de estas plataformas, Emsculpt y Emsculpt Neo que provoca 20.000 contracciones musculares potentes por sesión. Hace poco se ha presentado otra de estas plataformas pasivas de musculación, completamente hecha en España: Wonder Technology. Conforme sus autores, una de estas sesiones de veinticinco minutos equivale a tres horas de adiestramiento físico.
¿Estas plataformas pasivas de musculación reemplazaría el ejercicio activo en un gimnasio, ir a nadar o correr un rato por las mañanas? No están reñidos ninguno de estos métodos. Son diferentes si bien su fin sea el mismo: quitarte las grasillas de encima y desarrollar musculatura. Lo que sí diferencia a estas plataformas de ir al gimnasio es, por una parte, el costo y por otro que para emplearlas debes ir a centros ciertos donde están estas máquinas y no al gimnasio de a la vera de tu casa.
Que conste me semejan un inventazo. Tú, ahí, tiradita en una camilla (la de esta fotografía soy probando Wonder Technology) con un montón de sensores y paneles electromagnéticos que provocan miles y miles de potentes y profundas contracciones musculares, tensando la piel de forma mecánica y natural.
Esta tecnología, cien% de España, son usadas por vencedores del planeta y equipos nacionales de múltiples disciplinas deportivas pues corrige la pérdida de solidez cutánea y la retención de líquidos. Además de esto, mejora la actividad linfática, la microcirculación y la vascularización. Por otra parte, suprime el exceso de grasa y remodela y fortalece los brazos.
¿Qué notas cuando usas una de estas plataformas?
Además, de que se suda una brutalidad (y no sudo apenas), se aprecian contracciones esenciales en cada uno de ellos de los músculos donde van los sensores. Estos se ponen en las piernas, en los brazos, en la espalda y en los glúteos y en las caderas. Cada vez que llega una de las contracciones a tus músculos, el cuerpo lo nota; en algunas zonas lo sientes más y en otras, menos. Una de las diferencias entre Wonder y Esculpt es que con la primera de estas plataformas puedes modular la intensidad de las contracciones. Yo la tenía bajita y los músculos y yo los notábamos. No duele pero notas la contracción.
Cuando comienzas la sesión te proporcionan una tablet en la que se modula la intensidad de cada uno de ellos de los sensores. Puedes aguantar más, quizá, en las piernas y menos en el abdomen. Así que puedes darla más “caña” o menos. Aún así, siempre y en todo momento hay que dejarse guiar por la persona que esté en el centro estético o médico donde trabajes con la máquina para no hacerte daño.
Según la marca Wonder Technology, la máquina “funciona forzando a los músculos a contraerse hasta cincuenta y dos veces a lo largo del tratamiento y provoca un desarrollo que va desde un dieciseis% hasta un veinticinco% del volumen de masa muscular. Con dos sesiones por semana de veinticinco minutos puede apreciarse un cambio sustancial”.
Cuando acabé de mi sesión, aparte de sudada, aprecié que todos y cada uno de los músculos estaban en tensión; habían trabajado y se apreciaba. Me hallaba hasta más esbelta… Obviamente, los resultados finales con una sola sesión no se perciben demasiado.
Cada sesión cuesta más o menos unos 65 euros y se pueden adquirir bonos con descuento.
En España ya puedes localizarlo en más de trescientos puntos. Entre ellos, los centros de Felicidad Carrera, Carmen Navarro, Clínica Aranda y Clínica Ibiza, en Madrid; Dr. Ortiz Bellver, en Valencia; Dr. Beltrán, en Alicante; Platinum Medical Center y Novalmedic, en Barcelona; Clínica Marest Medicina Estetica SL, en Sevilla; Inno Esthetic Artekale, en Bilbao y Clinica Estersa, en Pontevedra.