Tanto los prebióticos como los probióticos son conocidos y utilizados desde hace un buen tiempo en alimentación. Sus beneficios se vinculan a la restauración y mantenimiento de una conveniente actividad de diferentes funciones anatómicos. Pero cada vez son más los estudios que prueban que estos microorganismos además aportan propiedades inusuales para el bienestar de la piel. Por eso se incluyen además como ingredientes en productos cosméticos.
Qué son y por qué favorecen nuestra piel
En la superficie de la piel hay un ecosistema complejo formado por bacterias y hongos. Estos son precisos para mantener la piel en equilibrio.
Imposible de querer a simple vista, este ecosistema lleva por nombre microbiota, y está formada por diferentes organismos que se clasifican en provechosos, neutros o patógenos.
Entre los microorganismos vivos aliados, encontramos los probióticos, que asisten a mantener sana la piel que habitan. Marchan contrarrestando la actividad de los organismos patógenos, responsables de la irritación, enrojecimiento, descamación y envejecimiento prematuro de la piel.
Participan aparte de esto en la producción de substancias útiles para mantener la piel en equilibrio y prosperar su sistema inmunológico.
El mantenimiento y desarrollo de la comunidad probiótica de la piel, puede ser promovido por compuestos específicos, los prebióticos, hidratos de carbono elegidos para alimentar las bacterias beneficiosas, capaces de estimular de forma selectiva la actividad y el desarrollo de la fracción buena de la microbiota, y contrarrestar la proliferación de las bacterias perjudiciales.
Por eso, una vez descubierto el beneficio prebiótico en la piel, las marcas cosméticas se pusieron a diseñar productos que incorporasen dicho comible para nuestras bacterias buenas.

PVP: 35,90 €.
La línea facial Natural Cómputo de Oyuna, se creó utilizando prebióticos de la caña de azúcar, elegidos por su capacidad para promover el equilibrio de la piel y su bienestar. Sus productos previenen los procesos de irritación cutánea que provocan el envejecimiento prematuro, y aportan equilibrio y sinergia para una piel en armonía, vital y radiante
Los prebióticos representan una valiosa fuente de nutrición para las bacterias provechosas que pueblan la superficie de nuestra piel, esenciales puesto que mejoran el sistema inmunológico epidérmico resguardándolo de picor, irritación, enrojecimiento, y gastan y asimismo inhiben la actividad de las bacterias malas.

PVP: 9 con cincuenta €
Bruma Dermaseptic de Laboratorios BABÉ. Efecto barrera para manos, rostro, cuerpo y pelo. Hidrata y cubre la piel con un velo invisible. Ayuda a protegerla frente a los agentes externos y a limitar la proliferación bacteriana de microorganismos. Robustece y reequilibra la barrera cutánea y refresca la piel.

PVP: 7 con noventa € (hand cream) y 15 con noventa € (refill).
Práctico formato en spray y asimismo renovadora fórmula sin alcohol para atestar la higiene. De veloz absorción, es capaz para toda la familia, desde los 3 años y además para pieles sensibles.
Cada vez que lo precises, vaporiza sobre el rostro con los ojos cerrados, manos, cuerpo o pelo. No hace falta extender. Puede reaplicar en tantas ocasiones como sea preciso.
Cream Pops de HAAN, crema de manos con prebióticos como la inulina o la fructosa, que cuidan del microbioma y complejos aromas inspirados en grasosos helados. Aparte de esto, es posible recargarlas para evitar la utilización añadido de plástico y agua, como la generación de restos extra.

PVP: 35 €. De venta en farmacias elegidas.
Bariederm Cica Daily Serum de Uriage. La fórmula incluye prebióticos, que como hemos dicho reparan las barreras cutáneas y microbianas. Textura fresca y ultra-fluida, sin fragancia y no pegajosa penetra por un momento en la piel, dejando su empleo diario en todo el rostro. Su alta tolerancia hace que sea capaz para todos las clases de piel y da la máxima comodidad para esas pieles que se sienten tensas y con sensación incómoda.

PVP: 15 con cincuenta € treinta ml.
Crema reparadora Maskné Repair de Camaleon Cosmetics. Mantiene la piel en buen estado y repara los inconvenientes causados por la fricción de la mascarilla higiéneica. Nutre, regenera y repara la barrera hidrolipídica de la piel ayudando a proteger sus mecanismos naturales de defensa. Es capaz para pieles sensibles. Ideal para aplicar tras retirar la mascarilla y calmar la zona gracias al, entre otros, complejo prebiótic incluido en su fórmula.