Si estás acá es pues has cruzado la barrera de los cuarenta años y quieres saber de qué forma iniciar con una rutina antiedad para mitigar y prevenir los signos del envejecimiento prematuro de la piel.
Pero ya antes has de saber algo: el término «antiedad» no me agrada nada de nada. Las arrugas en la piel son señal de que llevas viva muchos años, de las experiencias amontonadas y todas y cada una de las cosas valiosas que has aprendido (y las que te quedan por aprender). En el artículo empleo la palabra «antiedad» a fin de que me halles de forma fácil en Google cuando procures una rutina para combatir el envejecimiento prematuro de la piel. Solamente. Felicitaciones por haber llegado hasta acá.
Ahora vamos a por los hechos: conforme las personas nos aproximamos a los cuarenta años empezamos a estimar algunos cambios en nuestra piel. Las arrugas, la carencia de brillo y pérdida de la elasticidad se deben a que vamos perdiendo la capacidad para renovar las células de forma veloz y de generar colágeno y elastina.
También podemos apreciar que, a pesar de que nuestra piel siempre y en todo momento había sido mixta o bien grasa, comienza a secarse con más sencillez. Además de esto, empezaremos a ver como las máculas solares hacen su aparición (sí, de ahí venía lo de que el daño solar se marcha amontonando) si no hemos protegido nuestra piel del sol como se debe.
Cómo debe ser una rutina facial antiedad
Una rutina facial antienvejecimiento para pieles maduras consiste en cuidar la piel con más mimo que ya antes, usando fórmulas más ricas y espesas para eludir la sequedad de la piel, aparte de agregar activos clave como el retinol, los ácidos exfoliantes o bien la vitamina C. Sin olvidar utilizar un protector solar facial diariamente, el mejor antiarrugas que existe.
A continuación he construido una rutina para pieles con signos perceptibles del envejecimiento, con productos escogidos esmeradamente para lograr los mejores resultados. ¡Comencemos!
1. El limpiador cremoso
Sí, a lo mejor has estado utilizando toda la vida un limpiador en gel de esos que hacen espuma, mas conforme la piel avejenta te percatarás de que acostumbran a ser demasiado violentos y secantes para ti.
Por eso es mejor que optes por un limpiador facial más suave y nutritivo, como este de la gama Toleriane de La Roche Posay. Su lista de ingredientes es cortísima y su tensioactivo primordial es la betaína, de los más suaves que existen. Es capaz de adecentar y desmaquillar, con lo que va a ser un enorme aliado en tu rutina de limpieza de cutis.
Cómo utilizar el limpiador cremoso
Primero humecta tu semblante con agua. Entonces toma una almendra de crema limpiadora en tus manos y masajea la piel del semblante en forma de círculos. Es esencial que lo hagas de forma enérgica sobre los ojos y labios, especialmente si no has efectuado el paso inicial de la doble limpieza (tampoco te pases, amiga). Retira el producto con agua y prosigue con tu rutina
2. El exfoliante facial
La exfoliación es ventajosa para cualquier clase de piel, mas es singularmente interesante en pieles maduras puesto que con el paso del tiempo la velocidad a la que se renuevan las células de la piel va reduciendo, y todo el proceso se vuelve más lento y menos eficiente. La exfoliación consiste en ir retirando las capas más superficiales de la piel a través de químicos o bien partículas físicas para dejar paso a las capas de más abajo, que son más jóvenes.
Dependiendo de tu género de piel optarás por ácidos AHA, BHA o bien PHA (o bien una combinación). Si tu piel es normal o bien seca, escoge un producto exfoliante con ácido glicólico, como este sérum de Sesderma con un seis% de ácido glicólico libre. Este ácido estimula las capas más profundas de la piel para fomentar un cutis más plano y refulgente.
Cómo utilizar un exfoliante en formato suero
Aplica unas gotas de sérum en la palma de tu mano y masajea sobre todas y cada una de las áreas de tu semblante.
¿Cuando hacerlo? Verdaderamente puedes exfoliarte la piel cuando desees, mas como causa sensibilidad al sol tal vez es mejor hacerlo por la noche. Procura no entremezclarlo con otros activos potencialmente irritantes. Exfolia tu piel en noches alternas en el caso de este producto (cuidado, hay otros exfoliantes más concentrados que deberás separar aún más). Recuerda, como más ligero es el producto ya antes lo situaremos en la rutina. En un caso así, inmediatamente antes de tu crema hidratante.
3. El suero de vitamina C
De igual forma, los niveles de antioxidantes naturalmente presentes en la piel reducen. Estos se hacen cargo de «anular» los radicales libres que se producen con la exposición solar, la polución y otros agentes externos irritantes. ¿Has visto alguna vez lo que le ocurre a una manzana cortada en contacto con el aire? Se oxida. Algo afín le ocurre a tu piel en contacto con las agresiones externas cada día.
La vitamina C tópica es buena opción para combatir esta oxidación, sobre todo a lo largo de tu rutina de día. Tiene muchos beneficios potenciales: alumbra, diluye arrugas, agrupa el tono de la piel…El único inconveniente es que no todas y cada una de las formulaciones son estables pues es un activo muy frágil, y hay que saber por cuál apostar.
En este caso, el que inspira más confianza entre profesionales y usuarios es el C Y también Ferulic de SkinCeuticals. Tiene un costo elevado, mas es de los únicos que ha probado su eficiencia en abundantes estudios.
Cómo utilizar el suero de vitamina C
Para utilizar este suero llena la pipeta hasta un tanto más de la mitad y vierte el contenido en la palma de tu mano. Entonces masajea el producto sobre el semblante hasta su completa absorción, con la piel totalmente seca. Para sacarle el máximo provecho utilízalo cada mañana, ya antes de tu crema hidratante y tu protector solar.
4. Suero de retinol
El retinol es un activo súper interesante para agregar en una rutina para piel con signos perceptibles de la edad (en verdad, es el único que incorporaría en una rutina minimalista debido a los abundantes estudios que respaldan su eficiencia). Estimula la producción de colágeno y elastina (los encargados de administrar estructura y elasticidad a la piel) desde las capas más profundas, algo que con una aplicación continuada mejora de forma notable la textura y calidad de la piel.
Los resultados de aplicar este ingrediente en pieles con signos de la edad son geniales, puesto que es el único activo que ha probado ser eficiente en el momento de disminuir al mínimo la apariencia de arrugas y líneas finas. Eso sí, el retinol es irritante y fotosensibilizante, con lo que es normal si sientes un tanto de irritación en las primeras aplicaciones.
El suero Intensive Retinol de Laboratorios Esthederm está compuesto por un 0.3% de retinol puro, y es concreto para personas mayores de treinta y cinco años por su potencial antiedad.
Cómo utilizar el suero de retinol
Vierte unas gotas de este producto en la palma de la mano y aplícalo sobre todo el semblante, eludiendo el contorno de los ojos y los labios. Espera un minuto a que se absorba y prosigue con tu crema hidratante preferida.
Es mejor emplearlo por la noche puesto que el retinol te hace más sensible a la radiación ultravioleta. Comienza con productos de intensidad moderada (como el que te he propuesto), y conforme vayas adquiriendo tolerancia a este activo puedes decantarse por productos con mayor concentración. No lo mezcles con otros retinoides.
5. La crema hidratante
La crema hidratante es un paso indispensable en tu rutina: aporta hidratación a la piel, algo que ayuda a que la barrera natural esté en condiciones perfectas. Con el paso del tiempo, a nuestra piel le va costando poco a poco más retener la humedad de la piel, y por ende nos vamos a sentir más cómodas y también hidratadas con productos más oclusivos y espesos que ya antes.
La Triple Lipid Restore de SkinCeuticals es una crema hidratante idónea para el cuidado de las pieles maduras debido a su única combinación de lípidos en forma de ceramidas, colesterol y otros ácidos grasos.
Cómo utilizar la crema hidratante
Aplica tu crema hidratante tras los productos con textura más ligera como esencias, sueros o bien tónicos. Utilízala tanto por la mañana como de noche.
6. El protector solar diario
Sí: el protector solar es la mejor crema antiarrugas que existe. La radiación solar es precisa para el cuerpo humano, mas un exceso de rayos UVA y UV genera un deterioro notable de la piel, aparte de ponerla bajo riesgo de sufrir cáncer de piel. Eso quiere decir que si te has pasado los veranos tomando el sol en la playa tu piel presentará signos evidentes de la edad propiciados por el sol, mas jamás es tarde para empezar a llevar un protector solar diariamente como una parte de tu rutina.
En el caso de las pieles maduras, las defensas naturales van reduciendo y las reservas de colágeno y elastina ya no son lo que eran, con lo que es esencial empezar a eludir el sol en sus horas más perjudiciales y resguardarte siempre y en todo momento con lentes de sol y sombrero si vas a la playa.
Usa un protector solar de extenso fantasma como el Anthelios Age Correct de La Roche Posay, por lo menos con SPF +50.
Cómo utilizar un protector solar cada día
El protector solar facial debes introducirlo en tu rutina de mañana, unos minutos tras tu crema hidratante. La cantidad a aplicar es la de una cucharadita de café para toda la zona del semblante y del cuello. Si vas a aplicar maquillaje después, espera un rato a fin de que se absorba por completo. Y lógicamente, la opción mejor es ir reaplicando cada 2 horas (si llevas maquillaje, puedes utilizar una protector solar en polvo).