Quizá te estés empeñando en suprimir esos antiestéticos puntos negros que salpican tu semblante y verdaderamente no sean lo que imaginas. Los filamentos sebáceos, en ocasiones, se pueden confundir con los puntos negros, mas su finalidad y naturaleza es diferente.
Lo que conocemos como puntos negros son poros obstruidos por el sebo natural de la piel en combinación con células fallecidas y diferentes bacterias. “Esto puede derivar (no siempre y en toda circunstancia) en procesos acneicos cuando, por un cúmulo de bacterias, se convierte en una infección que acaba con un proceso inflamatorio, causando granitos”, comenta Preciosa Hurtado, directiva técnica de la firma Boutijour. “Se vuelven negros por un proceso oxidativo, ya sea pues se oxide la substancia que lo compone al contacto con el entorno, por la sobreexposición al sol o, aun, por el uso de ciertos productos cosméticos que pueden favorecer la oxidación, como ocurre con las vitaminas C poco estables”, agrega Estefanía Nieto, directiva técnica de la firma Omorovicza.
Por su parte, los filamentos sebáceos asimismo se acostumbran a componer de sebo y de células de tejido dérmico que hacen que el poro se vea más abierto y grande pues el cúmulo de grasa puede dilatarlo, mas su color no acostumbra a ser tan oscuro (más blanco o gris) ni son tan pro acnéicos, ya que no amontonan tantas bacterias, esencialmente, pues no obstruyen el poro como sí ocurre con los puntos negros.
“Los filamentos sebáceos trabajan distribuyendo lípidos por la piel con la función de sostener o arreglar la función barrera. Lo que pasa es que, en ciertos casos y zonas concretas -como la nariz-, acostumbran a amontonar un exceso de grasa. Se acostumbran a distinguir de forma fácil cuando se extraen con tiras de tipo peel-off, esas que aplicamos sobre el semblante, dejamos secar y retiramos. Cuando de esas tiras vemos que salen filamentos que se desprenden de forma fácil de la piel, estamos por norma general ante filamentos sebáceos y no ante puntos negros”, agrega Raquel González.
El inconveniente de estas mágicas “tiras limpiadoras” es que pueden dañar la piel pues aparte de los puntos negros o los filamentos sebáceos, “se traen consigo otras substancias que son precisas para un equilibrio dérmico. En verdad, tienden a generar irritación al suprimir la barrera hidrolipídica de la piel”, comenta Ana Yuste, directiva de educación de Aromatherapy Associates.
Los filamentos sebáceos tienen inconvenientes y ventajas. Entre los primeros, asisten a sostener la función barrera de la piel al formar parte esencial de su componente de lípidos”. Mas, si bien son precisos, en ocasiones se presentan en demasía, sobre todo en la zona T en pieles mixtas y grasas. y si bien se supriman, tienden a resurgir, ya que son esenciales para la piel.
¿De qué forma tratarlos?
Aunque no pueden desaparecer, y si bien lo procuremos tienden a resurgir, pues son parte natural de nuestro tejido y su función es precisa, sí hay forma de que no estén tan presentes. Lo mejor para sostenerlos a raya es efectuar rutinas cosméticas que asistan a compensar los niveles de grasa. Son ventajosos los activos productos cosméticos seborreguladores como el ácido salicílico, el ácido alfalipoico o el retinol.
Pore Minimising Tonic de Medik8 está pensado, como su nombre señala, para reducir el tamaño de los poros palpablemente al trabajar sobre la supresión del exceso de sebo, reduciendo al tiempo su siguiente producción. Cuenta con ciertos musts para esto, como el ácido alfa lipoico, un fuerte seborregulador, que trabaja así como el ácido L-Láctico y el Ácido L-Mandélico para exfoliar el tejido. 53€.
Blemish Relief Retinol Treatment & Moisturizer, de Perricone MD, es una hidratante por la noche con retinol y ácido salicílico. Al tiempo que el primero trabaja renovando la piel, lo que va a ayudar a eludir la proliferación de células fallecidas, el segundo va a ayudar reduciendo la cantidad de grasa. Además de esto, cuenta con niacinamida, que asimismo libera los poros. 51,50€
Deep Cleansing Mask de Omorovizca es una mascarilla que purifica y trabaja sobre los poros por medio de las absorbentes arcillas y lodos Moor de Hungría, procedentes del mismo lago de donde se extrae el complejo termal Healing Concentrate de la firma. En sintonía, los dos principios purifican en profundidad y dismuyen la apariencia de poros congestionados y dilatados, al paso que regeneran la piel. 82€